Semana del 23/07/2006

Querido DiãlogoEcolñgico: éLa botella de soda en mi mano sñlo enumera unos pocos estados y los montos de depñsito. éEs que no hay mãs que un punãdo de estados que requieren que las botellas se devuelvan para ser recicladas?—Calvin Terry, Castine, ME

En estos momentos solamente 11 estados tienen "leyes de botella" en sus cñdigos requiriendo un depñsito normalmente de cinco a 10 centavos tanto en latas de cerveza o gaseosas y botellas que deben ser redimidas cuando se devuelven vacéas al mercado. El estado de Oregñn fue el primero con tal legislaciñn, aprobando la primera ley de botella en 1971. Hawaii es el mãs reciente, con una ley votada en 2002. Mientras tanto, todas las provincias de Canadã, a excepciñn de dos (el remoto Terrirotio Noroccidental y Nunavut) ostentan leyes sobre botellas. Como los reglamentos de Estados Unidos, las provincias de Canadã requieren depñsitos en todos los envases de bebidas excepto los que contengan leche.

El Instituto de Reciclado de Contenedores (CRI poor sus siglas en inglés), un grupo activista basado en Washington, D.C., labora para hacer aprobar nuevas leyes sobre el manejo de envases y para fortalecer las existentes. Segün el CRI, las leyes de botellas son ütiles porque estimulan el reciclado y, junto con los programas de reciclado en la calle, extienden la vida ütil de los basurales al no aceptar latas y botellas. En efecto, la tasas de reciclado en los estados con leyes sobre envases llegan a ser hasta tres veces mãs altas que en los estados sin ellas.

Tales programas también ayudan a reducir la basura en las calles. Repetidos estudios han mostrado que la legislaciñn sobre envases de bebidas ha reducido la basura por este concepto hasta 64 por ciento en las regiones que ostentan leyes de este tipo. Otro beneficio bien documentado ha sido la disminuciñn en las laceraciones por causa de vidrio, simplemente porque menos botellas terminan quebradas en las veredas, calles y otras ãreas de juego de los niños. Un estudio de Massachusetts atribuyñ una reducciñn de 60 por ciento en las laceraciones por vidrio en los niños una vez que se puso en vigor la legislaciñn estatal.

Sin embargo, a pesar de estos beneficios, muchos fabricantes de bebidas se oponen a estas leyes, aduciendo que cinco a 10 centavos mãs en el precio de la bebida reduce el consumo de sus productos aunque se sabe que se podrã redimir los depñsitos. Estas compañéas han tenido gran éxito en sofocar la legislaciñn sobre envases en muchos estados de EE.UU. a través del müsculo de sus organizaciones de presiñn legislativa. Anheuser-Busch, Coca-Cola, Pepsi y otras firmas han gastado millones luchando contra cualquier ley de envase, quejãndose que tal legislaciñn duplica los programas de reciclaje ya en existencia.

Pero CRI señala que tal argumento se ha formulado errñneamente en términos de "blanco o negro", que los depñsitos reembolsables y los programas de reciclaje "al borde de vereda" no son mutualm ente exclusivos y que deberéan formar parte de un sistema integrado de reciclaje: "Si la meta es optimizar el rescate de reciclables [y] reducir el uso de materias primas en la fabricaciñn de nuevos envases
entonces una combinaciñn de opciones de rescate deberéan usarse para asegurar las tasas
mãs altas de recuperaciñn".

Las ventas de bebidas estãn creciendo, especialmente agua embotellada y torso léquidos no gaseosos. Y el desperdicio ha estado creciendo a la par. Segün CRI, unos 118 mil millones de contenedores de aluminio, vidrio y plãstico se descardaron sin reciclar en 2002 solamente, mãs del doble de su nümero 20 años antes. La manzana de la discordia es quien deberéa pagar los costos de reciclado. Los depñsitos reembolsables son justos, dice CRI, porque ponen los costos en los ,productores y consumidores de las bebidas en vez de las comunidades locales y los contribuyentes.

CONTACTAR: Container Recycling Institute, www.container-recycling.org.


Querido DiãlogoEcolñgico: éCuãles son las implicaciones del descongelamiento masivo que vemos en estos momentos en la Siberia Occidental?—Brad Arnold, St. Louis Park, MN

Una delegaciñn de investigadores rusos regresñ el año pasado de una misiñn exploratoria en Siberia Occidental para reportar que la turbera mãs grande del mundo, en superficie tan grande como Alemania y Francia juntas, se estaba derritiendo rãpidamente en "laguitos poco profundos". Sergei Kirpotin, un botãnico de la Universidad Estatal de Tomsk (Rusia), y encabezador del esfuerzo de investigaciñn, señalñ al periñdico New Scientist que la situaciñn era "un desastre ecolñgico arrollador quizãs irreversible y que estã indudablemente conectado con el calentamiento del clima".

El principal problema es que hasta mil millones de toneladas de metano—un "gas de invernadero" 20 veces mãs potente que el diñxido de carbñn—podréa escaparse de la turbera, donde ha estado atrapado miles de años sin presentar peligros. Esta inyecciñn de metano en la atmñsfera podréa, a su vez, calentar aun mãs la atmñsfera.

Siberia Occidental se ha calentado mãs rãpidamente que cualquier otra ãrea del mundo, con un alza de temperatura promedio cerca de tres grados Celsius tan sñlo en las cuatro décadas pasadas. Kirpotin opina que la culpa la tienen los cambios de clima causados por el hombre, combinados con cambios céclicos en la circulaciñn atmñsferica causados por el derretimiento del hielo. Pautas similares se estãn viendo en la Siberia Oriental y a través de grandes extensiones ãrticas de Alaska.

Las turberas de Siberia se formaron aproximadamente 11.000 años atrãs hacia el final de la ültima era glacial. La gran turbera en cuestiñn se cree que podréa contener 70 mil millones de toneladas de metano, o sea aproximadamente un cuarto de todo el metano almacenado en la superficie del planeta. Si continua derritiéndose, como parece darse, los investigadores temen que el metano podréa forzar "un punto de volcamiento" (punto sin regreso) en la capacidad del clima de la Tierra para regularse a sé mismo.

"Cuando se juega con estos sistemas naturales, se puede terminar en situaciones donde el proceso no se puede parar", señala el experto en clima David Viner de la Universidad de Anglia Oriental (Inglaterra). "Esto es muy crético ya que no se puede reponer el permahielo una vez que ha desaparecido".

En 2001, el Grupo Intergubernamental de Expertos Sobre Cambios Climãticos, un grupo internacional de expertos sobre el clima, calcularon que las temperaturas podréan alzarse hasta 5,8 grados Celsius para 2100, grcias a las conocidas fuentes de gases de invernadero. Segün Viner, los cientéficos ni siquiera anticiparon la posibilidad de sucesos como éstos al hacer sus predicciones, y cuãnto ellos podréan añadi

r al calentamiento.

Los ambientalistas estãn usando los informes sobre Siberia Occidental para aumentar la presiñn sobre los léderes mundiales para que éstos introduzcan poléticas concertadas con respecto al cambio climãtico en marcha. Dice Tony Juniper, director de Amigos de la Tierra en Inglaterra: "Si no hacemos algo muy pronto, podréamos detonar una avalancha incontenible de calentamiento global la que conducirã sin duda alguna a una devastaciñn enorme en los ãmbitos sociales, econñmicos y ecolñgicos a través de todo el mundo. Todavéa existe la posibilidad de hacer algo, pero se nos estã acabando el tiempo".

CONTACTAR: New Scientist, www.newscientist.com/article.ns?id=mg18725124.500.