Si has disfrutado alguna vez del patinaje en el hielo, andar en trineo, esquiar, toboganear en la nieve, o hacer un muñeco de hielo, prepárate a ver cambios ya que el futuro de estos pasatiempos legendarios está ahora en duda.© Getty Images
Los efectos del calentamiento del planeta se manifiestan diferentemente en diversas localidades, y el invierno sin ninguna duda se estã acortando y calentando a través de Nueva Inglaterra, las provincias maritimas de Canadã y la Europa Septentrional.
En Nueva Inglaterra, las temperaturas medias del invierno han aumentado 4,4 grados Fahrenheit desde 1970. Los años 2006 y 1998 fueron los primeros y segundos años mãs calientes registrados en los E.E.U.U. desde que comenzamos a contar, con los ocho peréodos de cinco años pasados los mãs calientes en la historia. Segün el Centro Nacional de Datos Climãticos, el calentamiento ha ido aumentando durante las ültimas tres décadas, de apenas una décima de grado Fahrenheit por década a casi a un tercio de grado ahora.
Para 2100, se predice que las temperaturas en el noreste de E.E.U.U. podrãn haber aumentado entre 8-12 grados Fahrenheit, con el nümero de los déas de nieve reducidos a la mitad de lo acostumbrado en la actualidad. Un estudio reciente de la Union of Concerned Scientists [Uniñn de Cientéficos "Preocupados"] sobre los efectos del calentamiento del planeta en el noreste concluyñ que, bajo algunos panoramas, "solamente Maine occidental estã proyectado a conservar una estaciñn confiable de esqué antes de fin de siglo, y solamente New Hampshire norteño podrã sostener una estaciñn para motonieves mãs larga de dos meses."
Y parece que a medida que uno se mueve mãs y mãs al norte, el invierno se pierde cada vez mãs. El Estudio de Impacto del Clima Artico de 2004 divulgñ que las temperaturas ãrticas ahora se estãn levantando casi dos veces al éndice del resto del mundo (hasta 14 grados Fahrenheit durante los 100 años prñximos), reduciendo los mares congelados y deshielando los suelos de la regiñn. Se ha divulgado extensamente que los osos polares de Alaska estãn condenados probablemente antes de 2050, pero la escala de este cambio climãtico probablemente harã mucho mãscambiando profundamente la cultura del ãrtico.
Los impactos del calentamiento del planeta estãn lejos de ser monoléticos: Algunas partes del planeta se estãn calentando mãs y otras estãn experimentando temperaturas mãs fréas que las promedias y nevadas récord, tal como predicen los modelos del clima. Pero la tendencia general estã clara: El planeta se estã calentando, y el invierno estã perdiendo intensidad y duraciñn. "Si has disfrutado alguna vez del patinaje en el hielo, andar en trineo, esquiar, toboganear en la nieve, o hacer un muñeco de hi
elo, prepãrate a ver cambios ya que el futuro de estos pasatiempos legendarios estã ahora en duda, escribe E la revista ecolñgica, debes saber que el futuro de estas instituciones legendarias no estã garantizado de ninguna manera."
La retirada del invierno puede ser triste para los niños obsesionados con los trineos, pero también augura malamente para la economéa, especialmente los negocios que dependen de la nieve. La industria del esqué de Nueva Inglaterra ha experimentado declinaciones agudas en el nümero de déas que sus lifts llevan gente a las cimas. Las mãquinas de nieve, previstas originalmente apenas para cubrir los huecos dejados por la madre naturaleza, ahora funcionan a capacidad a través del invierno.
Y los fabricantes de motonieves reportan una caéda de un 50 por ciento en ventas durante la década pasada a medida que el nümero de déas nevados disminuye. Otra véctima mãs en el terreno de los negocios es la industria del jarabe de arce de Nueva Inglaterra, que ha sido frustrada estos ültimos años por deshielos tempranos que han agotado la capacidad de producciñn hasta un 50 por ciento. Segün Tom McCrumm de la Asociaciñn de Productores de Jarabe de Arce de Massachusetts, puede que para 2100 no exista mãs una industria de azücar de arce en Nueva Inglaterra.
CONTACTOS: National Climatic Data Center; Union of Concerned Scientists; Massachusetts Maple Producers Association