Semana del 18/06/2006

Querido DiãlogoEcolñgico: éQué significa que se haya descubierto una vaca en Alabama con la enfermedad de la “vaca loca”?

—Chris Carroll, Austin, TX

En realidad, la enfermedad de la “vaca loca”, técnicamente conocida como encefalopatéa bovina espongiforme (BSE, sigla inglesa), fué detectada por primera vez en norteamérica en enero de 1993, cuando una vaca de ganado importada de Gran Bretaña a la provincia canadiense de Alberta probñ tener el mal. El gobierno canadiense destruyñ la vaca en cuestiñn, a la vez que su rebaño completo, para contener la propagaciñn potencial de la enfermedad.

Las agencias agrécolas federales tanto de EE.UU. como Canadã comenzaron entonces a aumentar las pruebas de BSE de costa a costa, imponiendo también criterios de importaciñn mãs estrictos a vacas provenientes del exterior. Y puesto que la enfermedad se propaga no directamente por contacto de vaca a vaca sino solamente a través del consumo de alimentos infectados, ambos paéses prohibieron añadir sobras de ganado muerto a la comida de las vacas a principios de 1997.

Los esfuerzos redoblados aparentemente tuvieron éxito, ya que no se viñ ningün otro caso de BSE en norteamérica por toda una década. Sin embargo, en mayo de 2003, funcionarios veterinarios en Alberta confirmaron otro caso, esta vez involucrando una vaca nacida en Canadã. Siete meses después, funcionarios estadounidenses anunciaron el primer caso de BSE en EE.UU., cuando se viñ que los restos de una vaca en una granja del estado de Washington estaban infectados.

Las autoridades temieron que algo de carne contaminada podréa haberse filtrado a los supermercados, lo que a su vez detonñ una ola de histeria de “vaca loca”, incluyendo prohibiciones de importaciñn de carne norteamericana por parte de algunos paéses extranjeros. Los documentos mostraron que la vaca habéa nacido en Canadã, lo que llevñ a acusaciones mutuas a través de la frontera. Pero cuando la enfermedad se presentñ en una vaca en Texas en junio de 2005, y otra vez mãs recientemente en una vaca de Alabama, los norteamericanos dejaron de culpar a Canadã y comenzaron a buscar la manera de parar la propagaciñn de la enfermedad dentro de los EE.UU.

BSE, una enfermedad fatal del sistema nervioso del ganado, apareciñ primero en el Reino Unido a mediados de los años 1980, propagãndose luego por el resto de Europa, alcanzando casi 1.000 nuevos casos por semana en 1993. En 1996, se detectñ la variante Enfermedad Creutzfeldt-Jakob (vCJD), una rama de BSE, en seres humanos, que se creyñ también estar conectada a la ingestiñn de carne y productos de ganaderéa contaminados con BSE. A la fecha se ha detectado menos de 200 casos de vCJD, todos en Europa Occidental, desde que se identificñ la enfermedad humana por primera vez.

A pesar de las garantéas de los funcionarios canadienses y norteamericanos que los casos de BSE en años recientes han sido solamente casos aislados y que la carne de res de norteamérica no tiene problemas, algunos escépticos no estãn muy seguros. “Esta enfermedad es endémica en rebaños norteamericanos”, dice el columnista de asuntos de salud Mike Adams de News Target. “Estã circulando en vacas en estos momentos y es altamente probable que hayan vacas infectadas con la enfermedad que estén siendo sacrificadas y usadas en el suministro de alimentos a la poblaciñn”, añade él. A Adams le preocupa el hecho que millones de norteamericanos que comen carne cruda todos los déas se estén exponiendo al contagio mientras que el gobierno se ocupa de manipular la historia para sofocar las preocupaciones legétimas.

CONTACTOS: Health Canada BSE Information, www.hc-sc.gc.ca/fn-an/securit/animal/bse-esb/index_e.html; Sala de Prensa BSE del Ministerio de Agricultura de EE.UU. [U.S. Department of Agriculture BSE Newsroom], www.aphis.usda.gov/newsroom/hot_issues/bse.shtml.


Querido DiãlogoEcolñgico: éSe puede reciclar los neumãticos viejos? éY en qué se usa el material reciclado?

—George, Rockville, MD

Ciertamente, los neumãticos usados pueden ser reciclados, y gracias a los esfuerzos concertados de gobiernos estatales y federales de costa a costa, hasta 80 por ciento de éstos son en efecto actualmente reciclados a través de los EE.UU. Aunque algunas de estas llantas son refabricadas en llantas nuevas, otras se utilizan en una gran variedad de aplicaciones incluyendo amarras de riel, asfalto modificado por goma, superficies atléticas, aislamientos, mezclas de plãstico y goma usados en una gama amplia de productos, e incluso combustibles.

Los primeros neumãticos del mundo se fabricaron completamente de goma natural, pero los bosques de Asia Suroriental donde crecéan las plantas podéan producir solamente tanto. Para la Segunda Guerra Mundial, la mayoréa de las llantas se componéan principalmente de goma sintética hecha de productos de petrñleo. Hasta los años 1960, los neumãticos se reciclaban y deshuasaban rutinariamente para ser usados en la fabricaciñn de nuevas llantas. Pero cuando se abaratñ el petrñleo importado, cayñ la demanda de goma sintética reciclada, y pronto las montañas de llantas rechazadas por todos lados—la mayoréa de los basurales no las aceptan—empezaron a afear los paisajes de norteãmerica. Estas acumulaciones de llantas usadas se convirtieron en refugios ideales de plagas y mosquitos, a veces incluso explotando espontãneamente en llamas o lanzando erupciones nocivas al aire.

Comenzando a mediados de los años 90, los gobiernos estatales y federales de EE.UU. y Canadã encabezaron los esfuerzos de reciclaje de neumãticos mediante reglamentos y financiamiento directo de ellos. A causa de esto, ayudaron a estimular los mercados de goma sintética reprocesada que existen hoy déa. Ahora, miles de compañéas por toda norteamérica se especializan en convertir las gomas sintéticas recicladas en nuevos productos ütiles.

Los consumidores norteamericanos que desean desprenderse de neumãticos viejos deberéan echar un vistazo al sitio web “Manejo de Neumãticos Desechados”, de la Agencia de Protecciñn Ambiental (EPA), para ubicar centros de reciclado cerca de sus vecindarios. Los canadienses pueden ir al sitio web de la Asociaciñn Canadiense de Agencias de Reciclaje de Neumãticos (CATRA), para saber donde llevar las llantas usadas en cualquier provincia, incluyendo también el remoto Territorio del Yukñn.

La EPA también ofrece Guéas de Planificaciñn de Negocios gratuitas para aquellos que pudiesen estar tratando de iniciar un negocio de reciclado o refabricaciñn de neumãticos. El sitio web Noticias Sobre Neumãticos Desechados [Scrap Tire News] también provee una cantidad de datos valiosos ac

erca del mismo tema.

A pesar de este progreso alentador, norteamérica todavéa encara una acumulaciñn de cientos de millones de neumãticos viejos abandonados, los que continüan amontonãndose fuera de gasolineras y en traspatios cerca de Ud. La EPA calcula que anualmente se genera aproximadamente 290 millones de llantas viejas, representando dos por ciento de los desechos sñlidos, y que actualmente unos 265 millones se encuentran apilados por todos lados. Lo menos que podemos hacer es acatar el consejo de Participando en La Naturaleza: Guéa de Campo de Pericias Primitivas de Thomas J. Elpel [Participating in Nature: Thomas J. Elpel’s Field Guide to Primitive Living Skills] y convertir nuestros neumãticos viejos en “sandalias con 50.000 millas de garantéa”.

CONTACTOS: EPA Scrap Tires Page, www.epa.gov/garbage/tires/index.htm; CATRA, www.catraonline.ca; Scrap Tire News, www.scraptirenews.com/youask.html; Tire Sandals, www.hollowtop.com/sandals.htm.